Informe del IPCC de la ONU advierte alza de temperatura, retroceso de glaciares y baja en lluvias.
Sube la temperatura en el planeta y los primeros en sufrir los efectos han sido los glaciares. Las masas de hielo -que en Chile cubren 20.200 km2-, están retrocediendo en todo el mundo, incluido Chile, donde hay unos 2.000 y son claves para el suministro de agua.
Su vulnerabilidad es uno de los aspectos que menciona la segunda parte del Quinto Informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), presentado ayer en Yokohama, Japón. Más cauto que hace siete años, cuando se presentó el Cuarto Informe, el reporte de los científicos enfatizó en los efectos que el fenómeno ya genera en el mundo y para los que no todos los países están preparados.
Para Chile, el déficit en la disponibilidad de agua es el impacto más notable, dicen los expertos, y no sólo por el derretimiento de los glaciares. Asociado a ello está el alza de temperatura, sobre todo en el centro del país (entre 0,7 °C y 1 °C más en los últimos 40 años) y la baja en las precipitaciones (1 mm diario en los últimos 50 años).
“Estamos en una situación compleja. Al parecer este año no vamos a tener sequía, pero llevamos harto tiempo y esa señal es bastante consistente hacia el futuro”, dice Sebastián Vicuña, director ejecutivo del Centro Cambio Global, de la U. Católica, y uno de los autores del reporte. Eso, porque hay cerca de 30 modelos climáticos que proyectan la disminución de precipitaciones en la zona central, algo poco común para otras áreas.
La falta de agua afecta zonas urbanas y rurales y repercute en áreas tan distintas como la agricultura, la salud y el turismo. Agricultura es donde más se ha avanzado en adaptación.“Hay un plan sectorial, hicieron una lista de medidas y están empezando a trabajar, como en la eficiencia en el uso de agua, el riego tecnificado, apoyo al pequeño productor, seguros, algunas que ya existían, pero han tomado más fuerza”, indica Paulina Aldunce, experta del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2) y también autora del reporte.
A juicio de la experta, la adaptación al fenómeno está ocurriendo en el mundo y en Chile, pero a nivel reactivo, sobre todo en lluvias extremas o sequía. “La adaptación es tarea de todos, no sólo del gobierno”, dice Aldunce.
PLANES ESTATALES
Parte del avance en la institucionalidad para aplacar el fenómeno fue la creación de una Oficina del Cambio Climático en el Ministerio de Medio Ambiente o el trabajo realizado por MAPS, que analiza información sobre la generación de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y cambio climático en Chile.
Fernando Farías, jefe de la Oficina de Cambio Climático, dice que el actual Consejo de Ministros para la Sustentabilidad pasará a ser también un consejo para el Cambio Climático, con lo que esperan fortalecer la toma de decisiones. “Nuestra primera línea de trabajo es implementar el consejo, estamos muy contentos que se haya relevado de esa manera el tema y que se haya puesto al nivel de la sustentabilidad”, indica.
Con ello también reforzarán el compromiso de bajar 20% las emisiones de GEI hacia 2020, para lo que ya trabajan en un nuevo plan de acción.
Fuente: latercera.com