Si bien dice que con el discurso se confirma un espíritu de diálogo, espera una “mayor receptividad a las preocupaciones” en lo que resta de gobierno.
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Fidedigna, con un tono conciliador razonable y una esperable preocupación por el crecimiento económico. Así describe el presidente ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino, la cuenta pública presentada por la Presidenta Bachelet. Desde el sector que representa, dice, hubo a lo menos cinco puntos destacables.
“Primero, el que la Presidenta haya hecho un reconocimiento del sector minero como pilar del desarrollo. Segundo, el reconocimiento al programa Alta Ley y a una de sus propuestas, la meta concreta de crear 350 empresas proveedoras de clase mundial al 2035. Además, el que las leyes de iniciativa del Ejecutivo incluyan una evaluación de su impacto en la productividad y la creación de una Agencia de Cambio Climático”, detalla.
– Parte del discurso se centró en la idea de retomar el crecimiento económico, ¿cómo lo toman?
– Siempre es valorable que quien dirige un país dé señales pro crecimiento. Especialmente destacable es el reconocimiento explícito a que sin crecimiento económico no hay desarrollo social. Lo importante, ahora, es la coherencia entre esta preocupación presidencial y la agenda regulatoria y, especialmente, entre esta preocupación y el comportamiento del aparato público que incide directa y cotidianamente en el desarrollo de la actividad económica del país.
– ¿Abre una nueva etapa de diálogo entre empresarios y gobierno?
– Más que abrir una nueva etapa, con este discurso se confirma un espíritu de mayor diálogo y colaboración entre el gobierno y el sector privado que hemos venido viendo desde hace meses. Debemos seguir en esta senda, constructiva y proactivamente. Ya hay evidencia para afirmar que no basta con escuchar, hay que reconocer alguna razonabilidad en lo planteado por los sectores productivos, y actuar en consecuencia. Esperamos ver, por lo tanto, en los casi dos años que quedan al gobierno, una mayor receptividad a las preocupaciones y propuestas de éstos.
– El gobierno ha impulsado una serie de cambios y la Presidenta dijo que “ha habido resistencia” a ellas, ¿comparte esta visión?
– Me concederá que ha existido, en algunas de las reformas, un pequeño sesgo anti empresarial. Ante ello, también me reconocerá que la resistencia es una opción plausible. Sin perjuicio de lo anterior, el Consejo Minero ha participado activamente, en la medida que se le ha permitido, en todas las discusiones legislativas y regulatorias que de una u otra forma afectan a la industria y que son en múltiples áreas.
– ¿Qué temas son importantes para que la gran minería reactive sus inversiones o sólo depende de que mejoren las perspectivas de precios?
– Las perspectivas de precios sin duda son centrales para que se reactive el sector. Sin embargo, en un contexto en que el potencial minero del país sigue vigente, en este ciclo de baja es cuando necesitamos más que nunca recuperar la competitividad que hemos venido perdiendo, de manera tal que cuando cambie la tendencia, al menos mantengamos los actuales niveles de producción y liderazgo internacional.
El problema de la energía
– ¿La construcción de nuevas plantas ERNC (el 25% de la generación será de esta fuente en 2018) solucionará el problema de la energía?
– La construcción de plantas ERNC ayuda y es muy bienvenida por la minería, pero los sistemas eléctricos tienen una capacidad limitada para gestionar eficientemente energías intermitentes o discontinuas como son algunas ERNC. Su aporte debe ser complementado con fuentes convencionales y esperamos que estas últimas tengan tanto apoyo como las ERNC. El desafío de estas energías es el de transformarse en alternativas eficientes, seguras y económicamente competitivas, sin necesidad de subsidios regulatorios.
– ¿Y la construcción de nuevas líneas de transmisión solucionarán el problema de la energía?
– Uno de los debates regulatorios en que hemos participado últimamente, que afecta el costo del suministro eléctrico, es el referido a la nueva ley de transmisión. Vemos en esta iniciativa algunos elementos positivos. Sin embargo, hemos hecho ver que el nuevo régimen de remuneración para la transmisión, conocido como estampillado a la demanda, elimina la señal de localización para la generación y tiende a provocar una expansión ineficiente de la transmisión.
Estamos conscientes de la necesidad de hacer una ocupación más eficiente del territorio, pero estimamos que se llegó demasiado lejos, imponiendo a los dueños de estos sistemas -definidos como de uso esencialmente privado- obligaciones que son prácticamente las mismas que las de las empresas de servicio público cuyo giro principal es la transmisión.
– En materia de agua, los anuncios fueron sobre la DGA y la construcción de embalses pequeños, ¿se despejan las dudas ante la reforma al sistema de derechos de aguas?
– El agua es uno de los principales desafíos que enfrenta la industria minera, de ahí que cualquier anuncio que se haga con respecto al tema es importante, más aún si va relacionado a fortalecer la institucionalidad en materia de fiscalización y gestión del recurso. Hay un estudio del Banco Mundial de 2013 que detectó 102 funciones públicas sobre gestión del agua, repartidas en 43 organismos. Resolver esta dispersión institucional debiera ser priortario. En referencia a la reforma al Código de Aguas, se está priorizando el uso de agua en consumo humano y el saneamiento y eso nos parece razonable. Sin embargo, hemos hecho ver reiteradamente que hay imprecisiones y contradicciones que de no resolverse entorpecerán la gestión del agua, impidiendo su buen uso. Esperamos que el anuncio referido al envío de indicaciones apunte a resolver estas deficiencias.
¿Y la reforma laboral?
-¿Qué temas echaron de menos en el discurso?
– Quizás lo más llamativo es la definición sobre el destino de la reforma laboral que tanto ha condicionado la relación empresarios, sindicatos y gobierno durante el último año. Me parece que urge dar un corte definitivo a ese tema.
– ¿Cómo interpretan el que no se abordara la reforma laboral?
– Las noticias de los últimos días reflejan que el gobierno enfrenta dificultades para encontrar una salida. El que no se haya abordado en el discurso da a entender que no se han superado.
Fuente:Diario Financiero www.chilemineria.cl