Entidad estima 5,4 millones de toneladas, confirmando el estancamiento que se arrastra en la industria.

Importantes ajustes realizó la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) en su último informe de tendencias de mercado publicado este jueves.

En el documento apunta a que la producción de cobre mina en el país llegaría a 5,4 millones de toneladas en 2023, superior en un 1% respecto del registro del año pasado, mientras que para el año 2024 se proyecta un alza de 4,3%, alcanzando 5,6 millones de toneladas.

En el informe anterior presentado por la entidad estatal, correspondiente al primer trimestre del año, se esperaba que durante este ejercicio se alcanzaran las 5,6 millones. Es decir, la actualización implica un recorte de unas 200 mil toneladas, que se explica por los problemas operacionales y de menores leyes que vienen presentando las principales faenas mineras del país.

Estas cifras tendrán un impacto directo en el aporte que hacen las mineras a las arcas fiscales, tanto en pago de impuestos como en los traspasos que realiza la minera estatal Codelco.

En cuanto a la producción global de cobre, Cochilco indicó que las perspectivas de crecimiento siguen siendo moderadas, y que se espera llegue a 22,2 millones de toneladas. Esto es un alza de 2,8% respecto del año pasado, situándose por debajo de las proyecciones indicadas en el Informe de Tendencias anterior, que señalaban un incremento de 4,1%.

Ajustes en el precio

El vicepresidente ejecutivo de la entidad, Joaquín Morales, señaló también que se prevé que el precio del cobre promedie US$ 3,85 la libra en 2023, estimación inferior a la prevista en el último informe, de US$ 3,90.

Mientras que para 2024 se estiman US$ 3,75 la libra, también menor que el pronóstico anterior.

Morales explicó que el ajuste de la proyección de precio del metal para este año se debe a varios factores. Uno de ellos es la incertidumbre en torno al crecimiento económico de China, cuyo PIB continuó desacelerándose en el segundo trimestre, llegando a 6,5%. Lo anterior ha llevado a reducir los pronósticos de crecimiento para 2023 desde 5,5% a un 5%. A esta situación se suman la contracción económica que afecta a la eurozona y dudas sobre la expansión en Estados Unidos.

En cuanto a las variables que están favoreciendo la cotización del metal, el vicepresidente ejecutivo señaló que los inventarios en las bolsas oficiales se ubican en niveles históricamente bajos, la inflación en Estados Unidos mantiene su tendencia descendente, el consumo de cobre en China sigue siendo positivo y la producción de cobre mundial continúa mostrando, a mayo, cifras menores que las pronosticadas.