La moneda de Estados Unidos en Chile comenzó el día buscando los $810, pero con el correr de las operaciones moderó sus ganancias.

El dólar en Chile comenzó una nueva semana manteniendo su tendencia al alza y buscó superar las $810. Sin embargo, en las primeras operaciones del día, el dólar revirtió su avance inicial.

En concreto, y al inicio del día, el dólar sube respecto al cierre del viernes en la Bolsa Electrónica de Chile y llega a un valor de $808,50 la unidad.

El peso chileno se estabiliza pese a la presión que ejerce la caída del cobre, uno de los principales soportes de la moneda local. El pesimismo sobre el mercado de metales se fortalecía en medio de los débiles datos económicos de China, el principal consumidor del cobre, y la preocupación por el efecto de la desaceleración económica mundial en la demanda de metales básicos.

Los precios de producción chinos cayeron en junio a su ritmo más rápido en más de siete años, mientras que los precios al consumo se tambaleaban al borde de la deflación.

De esta forma, el valor a tres meses del cobre cae 0,78% a US$3,75 la libra en Comex, la principal bolsa de valores futuros.

En tanto, el dólar en el mundo se fortalecía, lo que hacía que los metales que cotizan en el billete verde resultaran menos atractivos para los compradores que poseen otras divisas. Mientras que, en el corto plazo, la atención se centra en los datos de los precios al consumidor en Estados Unidos del miércoles, que se espera que muestren que la inflación general se redujo a su nivel más bajo desde principios de 2021.

Los mercados siguen pensando que es probable que la Reserva Federal suba las tasas este mes, pero un informe débil del IPC podría disminuir el riesgo de un nuevo movimiento en septiembre.

Ante este escenario, el índice dólar, que compara a la moneda con una cesta de seis destacadas divisas, subía un 0,22%, a 102,50 unidades, tras ceder un 0,87% el viernes, después de que las nóminas no agrícolas de Estados Unidos aumentaran en 209.000 en junio, por debajo de las expectativas del mercado por primera vez en 15 meses.

Si bien los detalles del informe de empleo, que reflejan un crecimiento salarial persistentemente fuerte, subrayaron la posibilidad de una nueva subida de tasas de interés a fines de mes, los datos ayudaron a tranquilizar a los mercados en el sentido de que el fin del programa de alzas de tipos de la Reserva Federal está, al menos, cerca, aunque los recortes previstos para 2023 parezcan ahora improbables.