La norteamericana sería una de las candidatas para entrar a SQM. Las acciones serían puestas a la venta en octubre.
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Aunque desde Albemarle no se han referido al posible interés de entrar a la carrera en la venta por el paquete accionario que mantiene Potash en su competidora, SQM, desde el mercado ya han calificado la operación como interesante para la norteamericana.
Sin embargo, en el análisis financiero realizado por la consultora norteamericana Vertical Research Partners, que cubre a Albemarle, se explican las desventajas que existen para concretar el movimiento.
En el informe elaborado por Kevin McCarthy, se explica que el principal inconveniente en el camino de la estadounidense tiene que ver con los altos niveles de endeudamiento a los que llegaría si se concreta la operación, en especial porque el retorno sería a largo plazo.
Según las estimaciones, de hacerse con las acciones, se considera un Ebitda y un ingreso neto para 2018 de US$ 965 millones y US$ 447 millones respectivamente para Albemarle. Con estos niveles, habrían ganancias por US$143 millones, lo que sin embargo se vería disminuido en US$ 123 millones por los intereses detrás del financiamiento necesario para hacer la compra.
Además, la relación entre deuda y Ebitda crecería fuertemente, de las 0,8 veces que se calcula para 2018 sin la operación, a 4,8 veces de cerrarse finalmente el negocio. Estos cálculos se explican porque una parte la deuda neta sobrepasaría los US$ 5.200 millones, mientras que las ganancias crecerían sólo en un 15%, situándose en US$ 1.080 millones, quedando muy lejos del apalancamiento proyectado de entre 2 y 2,5 veces el Ebitda.
Las proyecciones utilizando el indicador de utilidades proporcionales de SQM harían mejorar ligeramente las cifras, ya que el retorno sería de US$ 309 millones, totalizando US$ 1.218 millones, pero aún con una elevado ratio de deuda de 4,2 veces.
“En nuestra opinión, este sería un tramo significativo para Albemarle, dada la cantidad de inversión de capital requerida para financiar futuros proyectos de expansión de capacidad”, comentó McCarthy.
Por el contrario, las razones que explicarían el interés de la norteamericana vienen de la mano de las sinergias operacionales que se producirían en el Salar de Atacama y que disminuirían los costos totales, así como la entrada a nuevos mercados. Pero, por sobretodo, le entregarían una mayor fortaleza para enfrentar el mercado del litio.
Para los próximos años se espera una fragmentación de los competidores luego del aumento de producción y aparición de nuevos actores, que llevarán la participación de Albemarle disminuya desde 32% en 2016, a 23% en 2025.
Requerimientos con nombre y apellido
La venta del paquete accionario que Potash mantiene en SQM resulta clave en la fusión que busca impulsar la canadiense en conjunto con Agrium, con lo que se creará Nutrien, la empresa de fertilizantes más grande del mundo.
La proyección de los analistas es que la operación se concrete a fines de año, luego del retraso que se produjo tras las solicitudes realizadas por distintas autoridades. La Comisión de Competencia de la India (CCI) estipuló que la compañía desinvierta las participaciones en SQM, Arab Potash Company y en Israel Chemicals, mientras que el Ministerio de Comercio chino solicitó que se desprenda de al menos una de las tres firmas mencionadas.
También surgieron solicitudes de otra índole de parte de la Oficina Canadiense de la Competencia y la Comisión Federal de Comercio de EEUU.
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Fuentes: Diario Financiero www.chilemineria.cl