Si bien el efecto en la industria mundial ha sido parcialmente compensado, se mantienen las alertas ante brotes que obliguen al cierre de faenas.
Aunque con matices, la industria minera a nivel global ha logrado sortear la crisis por el coronavirus, siendo uno de los sectores más resilientes. Prueba de esto son las proyecciones del reporte “Mine 2020”, elaborado por PwC, en el que se analiza la realidad de las 40 compañías mineras más importantes del mundo listadas en bolsa —donde se incluyen varias que cuentan con operaciones en Chile, como BHP, Anglo American, Antofagasta Minerals y Tianqi, entre otras— y que apunta a que el efecto en las finanzas de estas empresas sería menor.
Una de las razones que alude el documento y que explicaría esta respuesta, tiene que ver con el sólido desempeño financiero que arrastra el sector desde 2019, lo que ha otorgado a este grupo mayor flexibilidad para hacer frente a la crisis. “Estimamos que la volatilidad en los precios y la producción de los commodities básicos como resultado del brote solo afectará moderadamente la rentabilidad de los 40 principales en 2020. El mercado parece estar de acuerdo, y el precio de las acciones de estas empresas se recuperó más rápidamente que algunos de los principales índices en los últimos meses”, señalan.
Es por esto que desde PwC anticipan que los ingresos del sector se contraerán en un 6% durante este ejercicio, lo que se atribuye principalmente a los precios más bajos de los commodities, en esa línea, se espera también una caída del 6% del Ebitda de estas compañías. Junto con esto, se espera que ciertos costos de insumos —como el flete y el combustible— disminuyan, lo que se vería parcialmente compensado por los costos operativos más altos que podrían surgir de las medidas de distanciamiento social y las órdenes de permanencia en el hogar para aquellos que no pueden trabajar.
Otra de las tendencias identificadas tiene que ver con una menor celebración de fusiones y adquisiciones entre las empresas del sector, debido a la mayor incertidumbre económica y las limitaciones prácticas de las visitas e inspecciones en terreno de las faenas. Esto, pese a que las condiciones actuales son vistas como oportunidades para que las 40 mineras más grandes del mundo aprovechen las adquisiciones más pequeñas en sus mercados locales.
A nivel local, el senior manager de la industria minera de PwC Chile, Pablo Arancibia, destaca que el impacto sufrido por la industria ha sido, hasta ahora, poco significativo gracias a la proactividad que han mostrado las compañías. Sin embargo, el experto advierte que, a corto y mediano plazo, hay dos riesgos importantes que deben ser monitoreados de cerca.
“En primer lugar, están las potenciales disrupciones que pueden sufrir las cadenas de abastecimiento de equipos y suministros provenientes desde Asia; y en segundo, está el riesgo inherente a las dotaciones, no solo por la dinámica de vida en campamento, sino también el riesgo latente en cada traslado desde y hacia las faenas”, explica Arancibia, apuntando a posibles efectos en la producción.
Es por esto que desde PwC apuntan a que es clave fomentar el apoyo a las autoridades, a empleados y subcontratistas, con el objetivo de evitar o minimizar los impactos que puede traer un brote de contagios en cualquier faena, además de contar con planes de contingencia sólidos y oportunos en caso de aumento del nivel de contagios para asegurar la continuidad de las operaciones Con todo, Arancibia resalta el rol que ha jugado el sector como un pilar de las alicaídas arcas fiscales.
“Debemos destacar ampliamente el aporte que el sector ha hecho para evitar una caída mayor en las exportaciones nacionales, así como el rol que la actividad de las regiones mineras ha cumplido en la generación de importantes ingresos en divisas cuando el país más lo necesita”, explicó.
Fuente/Mercurio Chile Minería/www.chilemineria.cl www.facebook.com/chilemineria.cl/ twitter.com/CHILEMINERIA www.instagram.com/chilemineria #chileminería, #minería, #energía,#cobre,#centrocesco, #negocios,#aprimin