La empresa tomó esta decisión para mantener en actividad al personal no sindicalizado. Lo traslada desde el aeródromo Chamonate (Copiapó) al yacimiento en Tierra Amarilla.
El intenso ruido de los helicópteros se ha vuelto común en Copiapó y Tierra Amarilla en estos últimos días para asegurar el traslado de trabajadores de la mina Candelaria y mantener la continuidad de labores esenciales en las faenas. La empresa debió recurrir a este “puente aéreo” para movilizar a trabajadores que no se plegaron a la huelga que mantienen dos sindicatos, en medio del proceso de negociación colectiva, y que han cortado los accesos al yacimiento de cobre y oro en varias jornadas de protesta.
En este escenario, la empresa, que opera la canadiense Lundin Mining, decidió suspender sus operaciones el pasado martes debido al bloqueo de las rutas y accesos a las instalaciones en cerca de 15 puntos. Las faenas se ubican 25 km al sur de Copiapó, en la comuna de Tierra Amarilla, y los traslados de los trabajadores demoran 30 minutos. Ahora, con los helicópteros, los desplazamientos solo demoran siete minutos.
La minera, mediante un comunicado, explicó ayer que los traslados se hacen cumpliendo con todos los protocolos de seguridad de los trabajadores, tanto aéreos como sanitarios, “con la única finalidad de proteger su integridad física ante posibles ataques y agresiones. Al mismo tiempo, debemos velar por la mantención estricta de los protocolos de salud en el marco de la pandemia por el covid-19”. El sindicato Mina fue el primero en iniciar la huelga legal el 8 de octubre, con 350 funcionarios.
El segundo en sumarse fue el sindicato Candelaria, el 20 de octubre, con 650 mineros que se plegaron a la movilización. El intendente de Atacama, Patricio Urquieta, aseguró que los vuelos están siendo monitoreados por la autoridad aeronáutica local y que serán fiscalizados cuando corresponda. En tanto, el ministro de Minería, Baldo Prokurica, ha mostrado su preocupación por el conflicto, sus efectos económicos para el país, por lo cual llamó al diálogo entre las partes en conflicto.
Desde la empresa se informó que “la operación se retomará solo una vez que sea posible contar con las garantías necesarias para la protección de todos los trabajadores”. Durante este período, se continúan ejecutando trabajos esenciales para cumplir con las normas de seguridad y resguardo del medio ambiente.
Desde el inicio de sus operaciones en 1995, Candelaria se ha posicionado como la operación de mayor envergadura y la de mayor producción de cobre en Atacama, con 75 mil toneladas de mineral procesadas al día. La mina tiene 1.400 trabajadores propios y 3.900 contratistas. El presidente de la Corporación para el Desarrollo de Atacama (Corproa), Daniel Llorente, sostuvo que “esta negociación se da en un momento muy complejo en la economía regional, donde la minería es la actividad productiva más potente que tenemos y durante la pandemia es la responsable de apoyar a Chile con su trabajo”.
Patricio Gárate, presidente del sindicato Mina, criticó la decisión de la empresa: “Dice no tener dinero para negociar, pero gasta millones en helicópteros”. Fuentes vinculadas a las empresas de transporte explicaron que, según el valor de mercado, los vuelos pueden tener un costo mínimo de US$ 500 la hora hasta los US$ 1.500 según el tipo de nave y servicio que se requiera. Sobre las acusaciones de la empresa de cortes de camino, Gárate sostuvo que “ningún trabajador o trabajadora ha hecho desmanes o apedreado los buses. Es una huelga pacífica”.
La minera Candelaria también afirmó ayer que “seguiremos haciendo todos los esfuerzos necesarios (para mantener el diálogo con los sindicatos). Para eso, deben darse las condiciones básicas de respeto mutuo, buena fe y dentro de las normas del Estado de Derecho, que todos debemos acatar”.
Fuente/Mercurio Chile Minería www.chilemineria.cl www.facebook.com/chilemineria.cl/ twitter.com/CHILEMINERIA www.instagram.com/chilemineria #chileminería, #minería, #energía,#cobre,#centrocesco, #negocios,#aprimin