A medida que las compañías redefinen el mercado, enfrentan la presión de demostrar que sus inversiones reducen las emisiones en general.
La carrera por conseguir acuerdos de electricidad para los centros de datos que requieren grandes cantidades de energía tiene a las compañías tecnológicas rehaciendo el mercado de energía renovable y lidiando con un nuevo desafío: cómo asegurar que sus inversiones reducen realmente las emisiones. Amazon.com Inc. señaló que planeaba anunciar los compromisos para comprar 1,5 gigawatts de capacidad de producción de 14 nuevas plantas solares y eólicas en todo el mundo como parte de su impulso para adquirir la energía renovable suficiente para cubrir todas las actividades de la compañía en 2025.
Las compañías tecnológicas están recurriendo a sus estados de cuentas para financiar los proyectos solares, eólicos y de otras energías renovables a una escala sin precedentes. En algunos países, los promotores dicen que la buena disposición de las empresas para gastar anticipadamente —al firmar compromisos para adquirir energía a un cierto precio por largos períodos— ha contribuido a hacer que las corporaciones sean más importantes que los subsidios de gobierno como los principales motores de la inversión en renovables. Amazon, Google de Alphabet Inc., Facebook Inc. y Microsoft Corp. son cuatro de las principales seis compradoras corporativas de convenios de adquisición de energía renovable dados a conocer públicamente, lo cual representa el 30%, o 25,7 gigawatts, del total acumulativo de las corporaciones a nivel global, de acuerdo a la firma de investigación BloombergNEF.
Amazon es la mayor compradora corporativa a nivel mundial; mientras que entre otros compradores importantes está la compañía de petróleo francesa TotalEnergies SE y AT&T Inc. “Es casi como una estampida en busca de energía limpia”, manifestó Michael Terrell, director de energía en Google.
La escala de estas inversiones está poniendo a las compañías tecnológicas bajo la presión de mostrar que los proyectos suman realmente nueva capacidad renovable a la red eléctrica en lugar de absorber el suministro que existía previamente. El problema intrincado es si las compras de energía verde de las mencionadas compañías reemplazan la energía que generan las plantas que emiten carbono o simplemente aumentan la generación de energía para alimentar el consumo cada vez mayor de esta a nivel global. Eso es importante, porque las compañías quieren decirles a los consumidores e inversionistas que están ayudando a reducir la producción de carbono absoluta, no solo moviéndola de un lado a otro.
“Solo porque pone un electrón limpio en la red no significa necesariamente que está desalojando un electrón basado en carbono”, indicó Brian Janous, gerente general de energía y renovables de Microsoft. Janous señaló que la compañía ahora está analizando las redes eléctricas para determinar en qué lugares y momentos del día la producción adicional de energía renovable reemplazaría a una gran parte de la producción de las centrales existentes que funcionan con combustibles fósiles con el fin de decidir dónde invertir. Los proyectos más recientes de Amazon, a través de siete estados de EE.UU. además de Canadá, Finlandia y España, han llevado los compromisos firmados de la empresa a un total de 10 gigawatts de producción renovable, informó la compañía.
Después de los nuevos convenios, Amazon es la principal compradora corporativa de todos los tiempos de energía limpia en EE.UU., de acuerdo a Renewable Energy Buyers Alliance, un grupo de empresas que promueve la obtención de energía renovable. Las nuevas plantas, las que abastecerán las operaciones de Amazon entre las que está la división de servicios en la nube, Amazon Web Services, tienen programado entrar en funcionamiento dentro de uno a tres años. Nat Sahlstrom, director de energía en Amazon Web Services, dijo que la empresa busca proyectos donde pueda ser la primera en establecer un modelo comercial que otras compañías puedan seguir para ayudar a impulsar la demanda.
Y agregó que Amazon solo selecciona proyectos basados en si sus compromisos de compra son fundamentales para la viabilidad de estos. “Si no fuera por nuestras inversiones en estos proyectos, no habrían salido adelante”, precisó. Google, la que aseguró que equiparó su consumo de energía con renovables a partir de 2017, dice que ahora tiene una meta más difícil: alinear su consumo con energía renovable no solo anualmente, sino hora tras hora. Eso significa que la compañía está tratando de asegurarse de que haya energía suficiente libre de emisiones de carbono en las redes eléctricas donde opera en los momentos en que está utilizando energía, lo que incluye de noche y en horas de mayor demanda. “Creo que la evolución implica concentrarse no solo en la cantidad, sino también en la calidad del suministro”, observó Terrell de Google.
Lo que ha impulsado las compras es el enorme aumento en el uso de datos y procesamiento computacional. En la última década, la eficiencia cada vez mayor ha compensado en gran medida el uso creciente, en parte cuando las compañías pasaron de los servidores computacionales locales a los proveedores de nube más eficientes, de acuerdo a la Agencia Internacional de Energía. Pero aunque hay más eficiencia que aprovechar, según los investigadores, no está claro por cuánto tiempo más, en especial con el surgimiento de las redes 5G y cuando una buena parte del mundo vive y trabaja en línea. “La industria de centros de datos es una de las mayores consumidoras de energía en el mundo”, indicó Stefan-Jörg Göbel, vicepresidente del área solar y eólica de la compañía noruega de energía Statkraft AS. “Están redefiniendo el aspecto de la demanda de la industria simplemente desde la física pura de esto”. Se ha estimado que los centros de datos responden por el 1% aproximadamente del uso de electricidad global, de acuerdo a un trabajo de 2020 que se publicó en la revista Science.
Las grandes empresas tecnológicas mencionan que han creado equipos internos formados por exnegociadores de acuerdos en compañías eléctricas, quienes pueden hacer tratos directamente con proveedores, evitando a menudo a una industria de intermediarios y corredores que manejan generalmente los convenios de energía. Las empresas como Amazon a menudo inundan un país donde tienen operaciones con solicitudes para proyectos de energía, según promotores. “Decimos que queremos ver cada proyecto potencial que podría estar en desarrollo en un país”, manifestó Sahlstrom de Amazon al referirse a su equipo que busca acuerdos de compra de energía, o PPA.
Los promotores de los proyectos de energía solar y eólica señalan que la demanda de las grandes compañías tecnológicas ha fomentado un alza en la demanda de PPA de otros compradores corporativos. Debido a que los proyectos requieren de una fuerte inversión anticipada que demora años en recuperarse, los bancos a menudo no los van a financiar —o les van a otorgar términos menos favorables— a menos que los proyectos tengan un comprador ancla que prometa comprar la mayor parte o toda la producción, según promotores y financistas de energía. En España, donde Amazon se ha comprometido a comprar energía de cinco plantas solares, los promotores aseguran que una serie de importantes compañías tecnológicas está buscando nuevos acuerdos.
“Estamos conversando con todas ellas”, expresó Martin Scharrer, quien lidera esas negociaciones para el productor de energía renovable Encavis AG, al referirse a las compañías tecnológicas. Scharrer anteriormente llegó a un acuerdo con Amazon para vender energía de una planta solar en las afueras de Sevilla, España. Facebook informó que alcanzó su meta de comprar energía renovable suficiente para cubrir sus operaciones globales, lo que incluye centros de datos, el año pasado, pero que sigue haciendo nuevos acuerdos, porque su uso de energía está aumentando.
El uso de electricidad de Facebook subió 39% en 2020, según su informe anual de sustentabilidad. “Esto está demostrando que los objetivos voluntarios están moviendo realmente el mercado”, comentó Urvi Parekh, director de energía renovable en Facebook. Microsoft indicó que tiene acuerdos de compra de energía que aún no ha anunciado y que lo catapultarán casi al primer lugar de los mayores compradores de energía verde del mundo. Janous dijo que su compañía se centra en las metas medioambientales compartidas más bien que en las clasificaciones, pero agregó: “Sabemos cuáles son las clasificaciones y, créame, mi jefe sabe cuáles son las clasificaciones, y cada vez que sale una nueva, yo estoy al tanto”.
Fuente/Mercurio Chile Minería www.chilemineria.cl www.facebook.com/chilemineria.cl/ twitter.com/CHILEMINERIA www.instagram.com/chilemineria #chileminería, #minería, #energía,#cobre,#centrocesco, #negocios,#aprimin